Y me halló aquí, nuevamente en la soledad de tu partida, tomando cafeína por querer, huyendo de Morfeo y su tarea, entablando platica con mis demonios y fantasmas de por vida puesto que mejor enfrentarlos en diálogo y no en una pelea. ¿El tema de hoy? Viene a ser el mismo de hace 1001 noches atrás, Del amor y otros males parecidos por toda la velada hemos de hablar. Del amor y su partida, del amor y su dolor, del amor y su duelo, además del amor y su ilusión, del amor y sus vuelos, amor que ha de recordar. El tiempo mi peor aliado, hace 200 lunas no me quiere hablar 50 primaveras han pasado y ninguna flor ha florecido 300 Soles he observado y ninguno me ha logrado calentar. 70 inviernos han golpeado la mansión donde he permanecido. 900 amores podrán pasar pero ninguno se ha de comparar al sentimiento e ilusión que en mí lograste crear. 80 otoños he visto pasar, las hojas cafés he visto volar, volar lejos lejos de mí, pero en mí te has de quedar.
Un atípico joven-adulto que necesita de vez en cuando vomitar todos los sentimientos que trae adentro, utilizando las palabras y versos como forma controlada de explotar desde el 98 más o menos.