Y QUIEN LO DIRÍA...

Y quien lo diría que yo de ti me enamoraría,
quien me diría meses atrás que me perdería
en tu amor y en tus brazos, en tus labios de miel,
en tus roces en cada centímetro de mi piel.

No se como paso, y es absurdo querer escribir nuestra historia.
Todo paso tan casual y tan rápido que es difícil encerrar todo
en un par de páginas compaginadas y compactadas.
Fue tu mirar, fue tu ser, fue tu querer lo que a mi me conquistó.

Nuestra historia de amor a nadie más le ha de interesar
pues solo tu y yo sabremos lo que verdaderamente sentimos.
A nadie más le ha de importar lo que hagamos o dejemos de hacer
la felicidad de nuestro presente está en nuestras manos.

Como muchas veces lo he dicho en versos pasados
no quiero y no puedo jurar eternidad ni perpetuidad,
puesto ni mi vida puede asegurar eso.
Lo que puedo asegurar es hacer de esto un amor que nunca olvides,
un amor que con una sonrisa recuerdes,
una canción que con gusto escuches,
un lugar que con alegría añores,
una relación que, dure lo que tenga que durar, te hará sentir la persona más dichosa del mundo.

Puesto yo ya me siento la persona mas dichosa del mundo al tenerte a ti a mi lado.
Hallo el cielo en tu mirada, ese cielo que soñé por tantas noches,
en tus labios esa adicción perfecta que sustenta mis anhelos.
En tus brazos encuentro ese hogar que me hace sentir agusto y a salvo,